¿Cómo evolucionará el empleo en el futuro?

La sociedad actual se caracteriza, entre otras cosas, por la velocidad a la que evoluciona. Esta velocidad nos afecta en muchos sentidos pero probablemente uno de los más importantes sea el empleo.

El 70% de los niños que hoy van a la guardería cuando sean mayores trabajaran en profesiones que aún no se han inventado (http://www.abc.es/economia/20140922/abci-siete-cada-diez-bebes-201409191727.html). La idea en un primer momento puede asustar, pero tan sólo es necesario que nos paremos a pensar en todos esos empleos que hoy nos parecen comunes y hace tan sólo una década no existían: community manager, blogger, desarrollador de aplicaciones,…

“El 70% de los niños que hoy van a la guardería trabajarán en profesiones que aun hoy no se han inventado”

¿Cómo afrontar un cambio tan brusco como éste? Aunque en un primer momento puede asustar un poco, lo cierto es que el cambio puede significar también esperanza. Los entornos de trabajo están cambiando rápidamente y el trabajo de freelance o desde casa parece, cada día más, una realidad para muchos. Tiene sentido por ello pensar que la oficina del siglo XXI será flexible y fusionará la vida profesional y la personal. El trabajador virtual está cada vez más cerca.

El trabajador tiene que cambiar su forma de pensar

El mundo laboral está cambiando rápidamente, la tercera revolución industrial está aquí y la reciente crisis financiera es un síntoma importante de este cambio que vivimos.

No se trata sólo de un cambio de planteamiento por parte de las empresas, el trabajador también tiene que cambiar el modo de ver su futuro profesional. Hace unos años, no tantos, una persona se formaba y a lo largo de su vida profesional apenas cambiaba de trabajo una vez o ninguna. Hoy en día eso no es posible, el empleado tiene que seguir formándose y estar preparado para el cambio, para tener otras responsabilidades en la empresa o para cambiar de empleo cada cierto tiempo. Más que un lugar, el trabajo pasa a ser una actitud y los profesionales que triunfarán en sus empleos serán los que aporten valor a su cliente, resolviendo sus problemas, necesidades o deseos.

“Los profesionales que triunfarán en sus empleos serán los que aporten valor a su cliente”

Las carreras lineales y estables son parte del pasado, el nuevo modelo de trabajo implica varias microcarreras con trabajos más complejos, especializados y también fragmentados. El cambio de mentalidad es total.

Principales factores que influyen

Uno de los principales factores que influyen en este cambio de mentalidad es el fenómeno migratorio. En el año 1975 había 500 millones de personas viviendo en ciudades, se calcula que en el año 2025 serán 2.000 millones y en 2050 el 75% de la población mundial.

Por otro lado está la digitalización de procesos, todo proceso de trabajo que se pueda digitalizar para ahorrar tiempo y costes se hará. Y por último, la necesidad de mejorar la productividad, es decir, hacer más con menos, que está muy ligado al segundo factor.

La unión de los tres factores (migración, digitalización y productividad) afecta irremediablemente tanto al empleo como a la forma de entenderlo. Por eso es importante pararse a pensar qué aportamos de valor a nuestros clientes, puesto que si lo hacemos y los proyectos en los que participamos se enriquecen, no nos faltará trabajo.

El aumento de la esperanza de vida nos afecta también. Cabe pensar que los 65 años de ahora se asemejan a los 40 años de antes, por lo que tendremos que trabajar más tiempo y, por tanto, deberíamos dedicarle también más tiempo a planificar nuestra carrera profesional.

Curiosamente, lo cierto es que dedicamos aproximadamente 22 horas a planificar nuestras vacaciones cada año pero menos de hora y media a diseñar nuestro plan de carrera.

Digitalización de procesos

Tal y como ya hemos dicho, todo proceso que se pueda digitalizar se hará pero eso es algo que ya estamos viviendo en estos momentos. Un claro ejemplo es cuando llamamos a un taxi. Antes simplemente levantábamos la mano y acudía, mientras que ahora le avisamos por el móvil, podemos valorar online el servicio, la rapidez, la forma de conducir y también decidir si la próxima vez queremos que nos lleve el mismo conductor.

Pero aunque es cierto que muchos puestos de trabajo desaparecerán a favor de otros gracias a la digitalización de procesos, también lo es que hay muchísimos trabajos manuales que continuarán existiendo. Un ejemplo de esto son los profesionales del vino, expertos que hacen un vino de calidad y que resultan insustituibles.

Eso sí, los profesionales con empleos manuales deben entender también la importancia y utilidad de las redes sociales y el marketing digital puesto que gracias a ellos pueden aumentar sus ventas, recibir recomendaciones, contratar empleados… hay espacio para el trabajo manual siempre que aportemos un carácter diferencial a nuestros productos.